Fuente: Prensa LatinaKabul, 20 jun (PL) Tres soldados de Estados Unidos perdieron la vida y otro resultó herido durante enfrentamientos librados con supuestos insurgentes afganos y un atentado dinamitero en la volátil provincia sureña de Helmand, informó hoy la comandancia del Pentágono.
En la primera acción, los rebeldes atacaron la víspera a unidades estadounidenses y les causaron dos muertos y un herido, de acuerdo con un comunicado difundido en la base aérea en Bagram, a unos 20 kilómetros al norte de Kabul, sede del mando de Estados Unidos en Afganistán.
El parte de guerra reportó también que otro soldado estadounidense y uno afgano murieron en un atentado con bomba perpetrado contra una caravana militar en el distrito de Gereshk, en Helmand.
El ataque se llevó a cabo por un suicida que detonó la carga explosiva que portaba adherida a su cuerpo al paso del convoy por un céntrico mercado de esa localidad.
Ese atentado se reivindicó por fuentes insurgentes mediante un correo de Internet, en el cual afirman que el ataque, dirigido contra un convoy militar estadounidense, causó numerosas bajas.
Fuentes de la policía indicaron por su parte que en ese ataque dinamitero murieron además otras cinco personas y seis resultaron lesionadas.
Los combates acontecen a diario entre las fuerzas de Estados Unidos y la OTAN y los rebeldes afganos, así como los atentados, en especial en el territorio sureño.
El atentado de ahora se registró después de que tropas de la OTAN y colaboradora afgana lanzaran una ofensiva contra los insurgentes en las cercanías de la ciudad de Kandahar, capital de la provincia homónima.
En la primera acción, los rebeldes atacaron la víspera a unidades estadounidenses y les causaron dos muertos y un herido, de acuerdo con un comunicado difundido en la base aérea en Bagram, a unos 20 kilómetros al norte de Kabul, sede del mando de Estados Unidos en Afganistán.
El parte de guerra reportó también que otro soldado estadounidense y uno afgano murieron en un atentado con bomba perpetrado contra una caravana militar en el distrito de Gereshk, en Helmand.
El ataque se llevó a cabo por un suicida que detonó la carga explosiva que portaba adherida a su cuerpo al paso del convoy por un céntrico mercado de esa localidad.
Ese atentado se reivindicó por fuentes insurgentes mediante un correo de Internet, en el cual afirman que el ataque, dirigido contra un convoy militar estadounidense, causó numerosas bajas.
Fuentes de la policía indicaron por su parte que en ese ataque dinamitero murieron además otras cinco personas y seis resultaron lesionadas.
Los combates acontecen a diario entre las fuerzas de Estados Unidos y la OTAN y los rebeldes afganos, así como los atentados, en especial en el territorio sureño.
El atentado de ahora se registró después de que tropas de la OTAN y colaboradora afgana lanzaran una ofensiva contra los insurgentes en las cercanías de la ciudad de Kandahar, capital de la provincia homónima.
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